23 junio, 2010

Día Febril (Parte III)


Ya se ha ido la fiebre, pero aún siento un calor interno, el tercero se viene, es positivo, es grato y es bueno. Definitivamente me encantan los preámbulos, sentir la alegría y el jolgorio de la gente, aquel que antes del partido de Chile, se percibe con fuerza por doquier, sobretodo cuando los pensamientos se unifican en una sola dirección.

Sin ser adicto al fútbol, puedo apreciar toda esa energía, esas emociones que se respiran en el ambiente, nerviosismo, ansiedad, entusiasmo, y porqué no, me contagio de esa buena vibra. Eso produce alegría, positivismo, salud, ganas.

Es increíble, me siento feliz de ser capaz de sentir, por muy distinto que parezca, raro o extraño, o por distintos que nos sintamos, por mucho que no nos guste esta sociedad impuesta, hay una cosa que siempre estará presente en cada rincón del mundo, y eso es una pausa en la vida, traducida en un momento de alegría.

Siente, porque sentir no tiene nada de malo, administrar esa capacidad tan humana, sin que esta se transforme en una lucha interior, sin duda es toda una odisea, pero se puede, porque la palabra “Paz” y “Prioridad”, en ningún caso significa quedarse quieto e inerte, sino todo lo contrario, es saber moverse en armonía con el universo, y que en esta ocasión, ese movimiento se traduzca en una sola voz, vestida de la palabra Gol.

No hay comentarios.: